La soledad no es como todos piensan, muchas veces es necesaria para aclarar ideas y sanar heridas vinculadas al amor, amistad o demás relaciones. Es por ello que siempre recomendamos un tiempo de soledad para pensar, reflexionar y analizar. Cuando estamos solos podemos aclarar nuestra mente y dejar de pensar «en caliente» a la hora de tomar decisiones.

La soledad, aunque muchos no lo crean, brinda un confort inesperado (para los que no están acostumbrados a estar solos), y a su vez brinda esa libertad que hace tanto no teníamos. Podemos rememorar viejos tiempos en donde nos acostábamos tarde, veíamos una película o una maratón de series hasta cualquier hora, comíamos lo que queríamos, etc. La soledad es buena compañera, nos distiende, nos hace independientes, no nos ata a nadie y por ende nos da libertad. Por ello si recién has concluido una relación lo mejor es pasar un tiempo a solas contigo mismo.