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Cada vez mas se da el caso de que mujeres de treinta y tantos años, bellas y exitosas, permanecen solteras.
Es una tendencia que se acrecienta día a día y el por qué se encuentra en la autoestima de los hombres. |
Años atrás, la mujer soltera era casi una rareza: a una temprana edad ya prácticamente estaba casada lista para ser una esposa devota y una madre de familia. Pero los tiempos cambiaron y aquellas mujeres con un piso y un techo muy marcados lograron abrirse paso y fueron ocupando cada vez mas roles masculinos. El tener independencia económica fue fundamental para que pudieran hacerlo, la libertad que da el dinero significa también independencia en otras materias, como la moral, las decisiones íntimas y sobre el destino mismo. Estas mujeres solteras y exitosas no necesitan mendigar y están en una posición donde además pueden exigir. Es esta conducta la que desconcierta al hombre y le hace temer.
Despojado de sus instrumentos de poder, el hombre no sabe como impresionar a esta mujer, no ve el flanco débil; es más: esa mujer se le aparece como un gigante que lo intimida. Ante esta realidad prefiere una retirada silenciosa antes que una derrota. Son muchas las mujeres que dicen que los hombres temen acercárseles. La imagen de éxito, independencia, e inteligencia que proyecta la mujer soltera los hace acobardarse. Ahora bien en un punto estas mujeres solteras no quieren permanecer solteras para toda la vida. No quieren que lo que tanto esfuerzo les costó adquirir para liberarse sea ahora su ruina sentimental. De cualquier manera poco pueden hacer, la culpa no es de ellas, sino de los hombres que no se atreven a seguir su evolución. Ellas dicen "Ya no quedan hombres" y es verdad cada vez menos hombres se acercan con ánimo conquistador a estas mujeres solteras del siglo 21. Intimidados y acobardados sueñan con días pasados donde eran amos y señores de sus mujeres. Sueñan y añoran la época en que eran tuertos en el país de los ciegos. |
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PERFIL DE LA MUJER SOLTERA
Liberada de las cadenas que la ataban y de la norma estricta de ser madre y ama de casa tiene el suficiente empuje como para triunfar en los negocios y sobrellevar su propia economía. Esto la convierte en alguien segura de su inteligencia, de su cuerpo y de lo que genera. La opinión de los hombres que tanto condicionaba el comportamiento de la mujer años atrás ha desaparecido por estos días. Ahora la mujer exige también cosas de su hombre como una igual. Veamos los puntos fundamentales de la psicología de la mujer soltera:
-Es conciente de su belleza; sin embargo, no hace de ella su centro de gravedad.
-Tiene actividades extra laborales y gustos bien definidos.
-El nivel de exigencia que tiene sobre los hombres es alto y va más allá de la riqueza o la belleza.
-Habla sobre sí misma sin ningún tapujo.
-En las relaciones procura satisfacerse en cambio de ser un instrumento de satisfacción ajena.
-Posee un grupo de amigas leales.
-No esta dispuesta a modificar una parte importante de su vida por ningún hombre.
-Pese a ser una mujer soltera no enloquece por conseguir un compañero de vida (que no implica que le de igual estar soltera).
-No necesita a un hombre a su lado para tener un punto de referencia o validez sobre sus decisiones.
Estos puntos básicos definen de alguna manera el perfil de una mujer soltera, sin embargo puede haber cientos de puntos mas, tantos como mujeres haya. Del hombre y de su propia superación depende el conquistarlas. Chicos, ¡no tengan miedo y vayan por ellas!
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