Cartas de amor no leídas por el destinatario
La siguiente carta de amor fue escrita por Magdalena y nunca fue enviada a su novio Pablo… hasta que la misma se hizo pública en nuestro sitio para él — felicitaciones, muchacho!!!
Él… Si preguntan qué significa en mi vida, el significa el agua, y lo compararía con el mar.
Mi hombre es como la marea, llega a mi playa, arrasa con todo y a veces se va. Él no es perfecto, tampoco es lo que yo soñé, sobretodo por su lejanía, ni rastro de lo que anhelé tener tan cerca. Pero en la vida de las mariposas como yo, llegan melodías que nos llaman la atención y un día cuando yo más sola me sentía, esa melodía entreabrió mis alas y dejó resplandecer mi candor.
Y yo en sus manos aprendí a volar, y descubrí un mundo lleno de ilusiones. Sentimientos que se hacen trizas cuando el alza su voz con fervor, porque la mariposa ha errado y en el camino tropezó. Pero no tengo la culpa de que todos me señalen como la princesa que va caminando dormida sin nada importarle, solo por querer creer un poco en el amor.
Corro entre valles de oscuridades y él sonríe y resplandecen todos los rincones inhabitables… Su mirada me eleva al cielo como en un túnel de estruendos y rayos, y las estrellas nos alumbran en las noches más tiernas de nuestras humedades. Y soy su mujer, porque así lo quiero, porque lo deseo, porque con él me siento viva… Que nadie juzgue a esta mariposa herida que solo busca el sentido de la vida para poder vivirla.
Y si me equivoco una vez más… Quien entonces me hará soñar, quizás sea él, o tal vez otro más… A quien le importa si la vida es como un juego de azar, hoy escribo yo y mañana otro lo hará. Hoy lloro yo y pasado lo hará él… Porque el amor es un sentimiento tan complejo que a veces se nos va la vida tratándolo de entender.
Si lo amo, yo no lo sé… Tal vez es un capricho de mi aun inmadurez. Tal vez sea yo la que al final salga lastimada como muchos suelen pensar, pero acaso no me han lastimado antes quienes por buenos se hacen pasar… Que nadie juzgue lo que siento, lo que vivo, lo que digo o lo que escribo. Él es mi dolor, es mi pasión, es mi vicio, mi adicción.
Nunca sabría que hubiera sido de mí si él no me hubiera abierto las alas… quizás hubiera sido la más feliz, o el alma en pena reflejada en un triste poema. Ya no queda mas que decir, se agotaron las palabras, aunque el corazón quiera seguir escribiendo con sangre sus lamentos…
Solo me resta decir… «Que Difícil es mantener el equilibrio cuando se vive dentro de una pasión…»
Simplemente…
Magdalena.
***
Porque dicen que las palabras se las lleva el viento he querido plasmar aquí mis palabras y poder expresar lo que por ti siento dejando de ello constancia.
Para cuando estés triste o riñamos, para cuando no nos entendamos, para cuando no esté cerca y no puedas oírlo de mis labios, para que nunca me niegues lo que ahora digo, por eso te escribo esta carta de amor.
Mi corazón esta tan vivo y late tan deprisa que necesita explotar en fonemas, aunque sabemos los dos que pequeños se nos quedan, que no existen palabras en nuestro rico diccionario para expresar nuestro amor.
Ahora bien te dedico todo esto por estos años que me has dado, por haberme soportado, comprendido, por todo lo que has cedido, por arroparme cada mañana besándome en la mejilla y a veces dejando caer tus labios en una suave caricia.
No puedo seguir con tus virtudes, porque sin hojas me quedaría y en una hoja quiero dejarte lo que tenemos tan grande, me encanta poder decir que te quiero, y saber que lo nuestro es tan especial hoy siento la paz a tu lado y la felicidad.
Tendremos malas rachas que nunca querré recordar pero sé que la fuerza que nos une es capaz de destruir la negatividad.
Amor mío te quiero tanto, que lo que acabo de escribir, ganas tengo de borrarlo y volver a empezar.
Siempre tuya…
Jose Antonio carrillo urcia says:
Jose Antonio carrillo urcia tengo 62 años y me agradaría tu amistad