La legislación latinoamericana sobre el concubinato, se ha modificado en muchos países y le brinda a las parejas que no están legalmente casadas, casi los mismos derechos que aquellas que han pasado por el registro civil. El tratamiento legal en Latinoamérica respecto del concubinato, contempla aspectos parciales de la ley en cuanto a derechos, o los contempla en su totalidad de acuerdo a una visión integral según cada país de Latinoamérica.

México fue el país que encabezo la regularización de los derechos para los concubinos en el año 1928, y dispuso medidas en ese sentido, como por ejemplo el derecho a los alimentos, a obras sociales, y vocación sucesoria. En Perú, el código civil a partir de 1930, establece presunción de paternidad a quienes hayan convivido durante el periodo de concepción. Otro de los derechos de concubinato en Latinoamérica, se establece en Venezuela en el año 1942, en donde se aprueba un contrato de comunidad patrimonial entre los concubinos.

Los mismo sucede en Paraguay desde el año 1956 que la comunidad patrimonial es un derecho de los concubinos luego de haber convivido por el termino de 5 años.  Las legislaciones respecto de los derechos de concubinato en Latinoamérica, se regulan según lo establece cada país, en muchos países los derechos de los concubinos se equiparan con los del matrimonio. Con los años, las relaciones extra conyugales fueron evolucionando en un contexto de formalidad debido a que este fenómeno social responde a diversas causas. En la actualidad en casi todos los países existe el divorcio vincular lo que permite, legalizar las relaciones en las parejas.

En general concubinos y casados, podrían tener los mismos derechos y en eso se trabaja con frecuencia. Generalmente las parejas podrían compartir la misma obra social, establecer pactos de convivencia, y ser compensados económicamente en caso de separación.  Los derechos de concubinato en Latinoamérica, van siendo cada vez más amplios, para que los concubinos no queden desamparados. En la actualidad, se denomina convivientes en lugar de concubinos, debido a la connotación despectiva u ofensiva que a esta palabra se le daba en años anteriores.

Para quienes deseen convivir sin estar casados, es conveniente que se informen sobre los derechos de concubinato en Latinoamérica dependiendo del país en que residan. Los acuerdos de ambas partes son fundamentales para tomar la decisión de vivir juntos y respetar esos derechos, además de conocer hasta donde los ampara la ley.