Los embarazos adolescentes son claramente embarazos no deseados, producto de la inexperiencia y la ignorancia de los jóvenes. ¿Cuál es la forma correcta de lidiar con esto? Lo primero es no lidiar con ello mediante la prevención. En cuanto sepas que tu hija tiene novio, debes sentarte a hablar con ella sobre la sexualidad. Muchos hijos y padres también, evitan esto por ser un tema incomodo y es allí en donde radica el problema; la sexualidad no debe ser algo incomodo, sino por el contrario, debe ser tomada como algo natural para que se pueda ser responsable. Pero por más educación sexual que le hayas inculcado a tu hija, un embarazo inesperado es algo que puede pasar.

En este caso, no debes perder la cabeza. Es cierto que esto es muy problemático especialmente por el cambio radical que supone en la vida de tu hija, pero la contención y el apoyo son fundamentales para ella se sienta mejor, y especialmente no tenga miedo. Especialmente si el padre del bebé a nacer no quiere hacerse cargo, es importantísimo que la familia de la joven, la contenga permanentemente.