Muy pocos pueden definir correctamente qué son los celos, y quizás esto ocurre porque se relacionan con varios aspectos negativos de nuestra personalidad y no pueden definirse de manera única. Los celos son una de las emociones más naturales del mundo, pero al mismo tiempo son incómodas y hasta dañinas con los que más queremos; esto se debe a que en ellos hay mezcla de posesión, desconfianza, inseguridad y, en ocasiones, hasta envidia.

Pero ¿Por qué somos celosos?

Los celos son una respuesta inherente al ser humano: simplemente se trata de buscar y proteger lo que se quiere. Nosotros amamos nuestras pertenencias, puesto de trabajo, amigos y pareja, entre otras cosas, y la idea es de perder lo que tenemos nos martiriza dando lugar a ese sentimiento que se torna casi posesivo. La raíz de los celos no es la misma para todos, están quienes han amado y perdido mucho, como los que todavía nunca han perdido lo que más querían y por ello sus celos no son tan agudos. Lo único que podemos hacer ante esta problemática es tratar de controlarlos, ya sea mediante ayuda profesional o de cualquier otra índole.