El cabello siempre debe lucir prolijo y saludable, brilloso e hidratado, hay productos de belleza capilar que son muy efectivos, pero antes hay que definir qué tipo de cabello tenemos, entre normal, seco o graso. El cabello es muy importante para que acompañe la belleza de un rostro pero más allá de eso, el cuero cabelludo debe estar sano, porque de lo contrario podrían empezar a manifestarse enfermedades como dermatitis seborreica, alopecia o caída de cabello, y otras. Si tienes cabello seco no deberías lavarlo a diario, y evitar productos como gel, mouse o fijadores.

El aceite de argán es lo más apropiado para el tratamiento del cabello seco. Sus propiedades lo hidratan, lo suavizan y lo dejan muy brilloso. Se aplica con un peine, y el cabello queda nutrido, humectado y con un brillo radiante. En cambio para el cabello graso lo más apropiado es lavarlo con un shampoo específico que sea suave, enjuagarlo, y por ultimo embeberlo en vinagre blanco o de manzana diluido en un poco de agua. Dentro de los trucos de belleza para el cabello hay una mezcla para fortalecerlo a base de una cucharada de aceite de ricino, ½ de café molido y una cucharada de aceite con vitamina E.

Esta mezcla se usa habitualmente como si fuera un shampu.  Si quieres aclarar tu cabello en forma natural utiliza una mezcla de miel, canela y limón. La miel y la canela contienen peróxido de hidrogeno comúnmente llamada agua oxigenada, y al incluir el limón te aclarara mas el cabello. Después de usar este truco de belleza para tu cabello debes hidratarlo con aceite de coco. Este truco realízalo cada 15 días.  Para combatir la caspa nada mejor que la combinación de ortiga con vinagre de sidra, hervir agua con unas hojas de ortiga durante 2 minutos, dejar enfriar y reposar un rato, colar, y mezclar con el vinagre.

Después de lavarte el cabello masajea en profundidad con la mezcla sugerida. Haciéndolo todos los días, veras que en pocas semanas le dirás adiós a la caspa.  Un truco de belleza para el cabello que lo deja genial y con mucho brillo, es utilizando un puñado de perejil fresco. Colocar agua en el fuego, y cuando hierve incorporar el perejil, retirar y dejar enfriar hasta que desprenda sus propiedades. Colar el líquido, y enjuagarte el pelo con este preparado, después de haberlo lavado normalmente.